LA PECULIAR FORMA DE HABLAR DE LOS AYAMONTINOS. 81: EL CHERO
Nuestros amigos de El Salvador y Honduras llaman chero al compañero, al amigo. En España no se conoce esa denominación, al menos oficialmente.
Los ayamontinos, sin embargo, sí la conocemos, y es para nosotros sinónimo mal olor, y se circunscribe en el mundo del pescado y en el del olor corporal, principalmente de los sobacos y los pies.
Es difícil que un ayamontino compre pescado en mal estado, por dos razones, una porque entendemos, y otra porque al entrar pescado todos los días los vendedores no suelen acaparar y normalmente se compra siempre pescado fresco. Pero cuando el pescado se tiene en casa más tiempo de la cuenta, aunque sea en el frigorífico, es normal escuchar esto: “niño, huele tú el pescado, a que mí me da un poquito de chero”.
Otro de los momentos clásicos de chero es el referido al mal olor corporal, sobre todo después de un ejercicio físico importante con proliferación de sudor. Dicen que los pies cantan –a este le cantan los pies-, señal evidente de que la sanidad no anda muy cerca, y no digamos nada de las axilas o sobacos.
Algunas veces observamos cómo alguien se levante de un sitio y se aparta del grupo. Cuando se le pregunta lo explica: es que a alguien le cantan los pies o los sobacos, ¿no notas el chero?.
Contra el chero de los pies, la mejor solución la tradicional, meterlos en agua templadita con sal, como hace el diligente señor de la foto.