Mojarreando

MOJARREANDO. Encarna Sayago y su "Cronipregón".

Supongo que sabrás, querida amiga Encarna, en qué consiste eso de la "deformación profesional", pero por si acaso, te lo explico. Es el fenómeno en virtud del cual, los componentes, la esencia en suma, de una profesión practicada durante muchos años, nos acompaña siempre sea cualesfueren las demás actividades en que participemos. Es el sello indeleble que forma parte de nuestras vidas. De ahí lo de "Cronipregón".

Porque tu pregón, Encarna, además de ser un ejemplo de bien hacer, ponderado, medido, ameno, gracioso en lo justo -lo poco agrada, lo mucho "jarta"-, resultó ser el pregón, no sólo de una gran ayamontina y una gran carnavalera, lo fue también de una gran periodista, aunque nunca hayas tomado apuntes en una universidad que no sea la de la propia experiencia vital. Fue un documento periodístico en su modalidad de crónica; muchos habrán pensado en eso tan recurrente de lo histórico, pero lo tuyo no fue un relato meramente histórico:  fue pura crónica; porque de la misma manera que la historia se cuenta desde datos existentes y que no vivimos, desde la investigación, la crónica es un testimonio directo de lo vivido in tempore e in situ.

Me agradó mucho tu pregón. Y tu "ropaje". No te rías, que te lo digo en serio. A ver ahora como lavas, planchas y guardas semejante tenderete.

Pero hay algo que no puedo dejar en el tintero: tu cronipregón no habría alcanzado esa cuota que raya en la perfección, si no hubiera sido por la invalorable aportación de tu gran amigo Toño Méndez, que por cierto, también loes mio.

Felicidades, y como tú sueles decir: un besote muy fuerte.

MOJARREANDO. Aspreato nos necesita.

Antes de nada es menester aclarar que la entidad Aspreato no sólo tiene como finalidad la atención al toxicómano. Desde hace un tiempo a esta parte abrió una nueva actividad encaminada a la ayuda de los más desprotegidos de la sociedad: los niños pobres, necesitados de todo.

Así, se creó la actividad denominada "Economato Infantil de Aspreato", a través del cual se facilita a los pequeños más necesitados tanto alimentos, como pañales, artículos de higiene, etc.

A lo largo de estos años,es cierto que Ayamonte siempre se ha volcado con esta altruista actividad cuando se organizan recogida de alimentos y de los artículos citados. Pero a veces, la demanda es demasiado grande y se necesita recurrir a otros medios de financiaciónd del Economato Infantil.

En este caso, Aspreato ha organizado para el próximo día 16 de septiembre, en el Teatro Cardenio, la presentación de la obra "No hay ladrón que por bien no venga". El precio de la entrada es sólo de 4 euros, que se puede adquirir en el domicilio social de Aspreato en calle Santa Clara o solicitarla de cualquiera de sus directivos, José Mari Fernández. el amigo Pau, Carmen, Elisabet...

Un ruego para terminar: durante las próximas fiestas de Las Angustias, un día cualquiera, escondamos cuatro euros para adquirir esa entrada, tan necesaria para el bienestar de los niños más necesitados de Ayamonte.

 

MOJARREANDO. Un paseo por el Arte en Ayamonte.

He estado, como casi todos los ayamontinos, dándome un garbeo por el Paseo del Arte; lo he hecho en dos etapas, para recrearme suficientemente.

Sin que esto signifique un análisis crítico -Dios me libre-, he salido muy satisfecho de tan agradable paseo. Ante tanta diversidad, uno no sabría con qué obra quedarse, pero yo no he tenido dudas: me cautivó desde el primer momento, tuve que pasar varias veces, acercarme otras tantas, para desengañarme de que estaba ante una obra pictórica y no ante una magnífica fotografía. En mi último intento para salir de dudas le preguntó a la autora, ¿esto cómo se hace?. Y me contestó con amabilidad y cierta ironía: con un pincel.

Y es que Gema Cayuela, como ese retrato de su hijo nos ha vuelto a embelesar. Me resulta increíbe, imposible, que se pueda llegar a esa perfección. Pero es así, indiscutible y afortunadamente así.

Enhorabuena al Ayuntamiento y a todos los expositores. Ayamonte es única y sabe demostrarlo cuando se lo propone.

MOJARREANDO. Desde la soledad de un buzón vacío.

Entre los "Cien años de soledad" de García Márquez, pasando por su impecable "El coronel no tiene quien le escriba", hasta la soledad y angustia de Armas Marcelo con su escritor ante el folio en blanco, no he conocido otra soledad más angustiosas que la de mi buzón de correos vacío.

Recordarán mis queridos blogueros que hace ya algún tiempo solicité ayuda para conseguir el alquiler de un piso de planta baja. Lo conseguí y ahora vivo en un piso pequeño, propio de un solitario, en el entrañable barrio del Banderín, concretamente en la calle Sor Eloísa. Pero he aqui que cada mañana al salir del casa como al atardecer al regresar, cuando introduzco la llave en el buzón de correos no encuentro otra cosa que al vacío, la más absoluta soledad. Ni siquiera los publicistas se acuerdan de mi, ni los portugueses de Pingodoce o Intermaché.

Se trata de una soledad insoportable. Por eso apelo a mis blogueros para que me remitan algo, lo que sea, aunque se trate de una reivindicación de la República que reciba de la ya extinguida IU del gran Juan José Santana. Lo que sea, todo menos esa soledad del buzón vacío que termina haciéndose insoportable.

Gracias de antemano.

MOJARREANDO. Conversar, ¿un verbo en peligro de extinción?.

Lo primero que se me viene a la mente al empezar este artículo, es el recuerdo de aquellas lejanas  noches de verano durante las cuales, en casi todas las calles de Ayamonte los vecinos sacaban las sillas a la calle, y en amena tertulia, conversando sobre todo lo que se terciera, sin discusiones estridentes, entre risas y buenas maneras, pasaban las horas, que se hacían especialmente largas los sábados, por aquello de que los domingos no se trabajaba.

Siempre he sido un enamorado de las tertulias, aunque últimamente suelo abandonar más de una porque parece que ya solo se lleva hablar de Ronaldo, de Messi, de Rajoy, de Pedro Sánchez, de Pablo Iglesias.

A veces, en el Casino España sale alguien recordando como íbamos al caño del Consorcio a recoger los trozos de atún,o como se alijaban los barcos del salado durante las noches de verano, o como sepreparaba una copa de cisco o se pescaban anguillas en el viejo Estero de la Ribera.

¿Se conversa hoy,o se discute con fanatismo excluyendo cualquier opción objetiva?.

Una de las últimas veces que participé de una estupenda terturlia fue el año pasado, en el bar el Costalero, a mi vuelta de Vigo, degustando unas copas de Albariño. Claro, que los presentes en la foto son verdaderos conversadores, gente que sabe oir al vecino y respetarlo. Así da gusto.

Y  comoe este artículo está abierto a la conversación, se puede escribir sobre lo que se quiera, hasta de Semana Santa. Pero para conversar, no para insultar, porque desde ahora advierto que cualquier comentario ofensivo será eliminado.

MOJARREANDO. La casa del tren, novela de Antonio Boza.

Tengo que confesar desde el principio mi falta de capacidad para meterme en estos menesteres de crítica literaria. Y por supuesto, mi falta de objetividad en el análisis de la novela de Antonio Boza por razones obvias.

Así y todo, tiramos palante.

La  novela en cuestión es del tipo saga familiar, lo que quiere decir que todos y cada uno de los personajes de esa saga familiar son a la vez protagonistas principales. El escenario es el ideal para la reflexion histórica: la Europa y la España convulsas del primer tercio del siglo XX. Desde la Gran Guerra (la Primera Mundial), pasando por la Guerra Civil española, Boza nos cuenta de forma maestra, a pesar de ser su primera novela, las vicisitudes de una familia alrededor de una casa familiar, La casa del tren, título en principio enigmático, como el papel del "perro de la película Gladiator", pero que al final resulta ser verdaderamente esencial para la historia que se cuenta.

Por experiencia me consta que en Ayamonte, generalmente, se lee poco o, si queremos ser menos pesimistas, no se lee mucho. Espero y deseo que la estupenda novela de Antonio Boza rompa ese ritmo.

MOJARREANDO. Restauración del monumento a la Inmaculada

Como diría el castizo, ya va siendo hora.

Ya iba siendo hora de que se restaurara nuestro emblemático monumento a la Inmaculada Concepción, eregido en mayo de 1954, Año Mariano para todo el mundo cristiano, y Año de la Nevada para los ayamontinos. (Imposible sería calcular las miles, cientos de miles, de fotografías que andan por esos mundos de Dios).

En mi supina ignorancia siempre crei que el monumento en cuestión era de escayola o material similar, cemento, yeso, etc. Y ahora vengo a enterarme que se trata de la marmolina, por lo que su restauración no podía consistir en un simple manguerazo a presión.

Para ello habría que contar con una artista consagrada como Carmen Sánchez Ruda, cuya valía ha quedado acreditada a lo largo de los ya muchos años que está con nosotros. En todo lo que emprende no sólo deja huella de gran calidad artística y profesional, sino del cariño que en ello pone.

A mis lectores recordarles que el inagotable Joaquín Casiñas ha organizado una rifa a fin de recaudar fondos para sufragar los gastos de la restauración.

Y a ti, Carmen, no me queda más que darte las gracias por algo aparentemente tan sencillo como que decidieras hace ya muchos años, quedarte entre nosotros. Ayamontina, pazguata y fina.

MOJARREANDO. Festival de Eurovisión:Vergüenza de ser español.

Hoy me siento avergonzado en mi condición de español. No soy racista ni nada que se le parezca. Pero me pregunto: si España cuenta con la Lengua más rica del mundo, ¿a qué viene ir por ese mundo utiliando el inglés?, ¿nos da vergüenza la españolidad universal de nuestra Lengua?

Vamos a ese esperpento televisivo que es el festival de Eurovisión a sabiendas de lo que va a ocurrir. Por menos hay gente procesada, porque este derroche económico no tiene parangón. Y menos mal que no ganó Australia, porque de haberlo hecho, el próximo festival se celebraría en España.

Esta niña que ni Dios sabe de dónde ha salido, cantó en inglés. Y así le fue: el puesto 22 de 26, y encima dice la guapita de cara que está muy contenta.

Pero nada, para el año que viene nos vamos a Ucrania a cantar en...., no se sabe, pero desde luego en Castellano no. Eso es de vergüenza, y nuestros políticos encargados de la Cultura ya se cuidarán de que no cantemos como catetos, en nuestra pobre Lengua. Modernos que somos. Mierda para todos ellos, y para que nadie me ponga de machista, para todas ellas.

A lo mejor Luis Morillas, tan catalán él, propone que cantemos en su lengua, ese dialecto desarrollado  llamado catalán.

MOJARREANDO: PACTO ANTITERRORISTA, UNA CUESTIÓN DE EQUIDISTANCIA.

Hoy se ha firmado el pacto antiterrorista en España, con perdón por decir España. A ese pacto de han opuesto los de siempre: IU, PNV y PODEMOS.

El PNV sigue como siempre, lo que ya hacía con la ETA,es decir, mirar a otro lado, como hacía el canalla del obispo Setíén. IU, como siempre, lo concdena todo menos las dictaduras de Venezuela, Cuba o Rusia. Y de Podemos, qué vamos a decir: justifica siempre la acción tentorrista otorgándole tintes extrañamente políticos.

Cuestión de equidistancia: para los nacionalistas vascos, los comunistas de IU y los de Podemos, tan condenable es la acción de los terroristas como la de la Policía, la Justicia, es decir, el Estado de Derecho.

Pues muy bien, ya saben los españoles a quienes van a otorgar sus votos. Personalmente me da miedo pensarque entre comunistas antiguos o novedosos nos metan en un laberinto del que ni ellos mismos saben como ban a salir.

Es una pena, pero así y todo habrá fiesta en la sede comunista ayamontina:la plaza del Chochito. Allí estarán el Santana, el Delars,el Nisa, el Morillas, celebrándolo. Pues nada, adelante.

MOJARREANDO. Marchando una de sucedáneo.

Hace ya muhos años, tantos que aun vivía y reinaba Francisco Franco, un escritor español llamado José María Pemán, escribía en una "Tercera de ABC" un artículo dedicado a lo que él vino en denominar como "los sucedáneos de los ministerios", es decir esos enchufes que disfrutaban ex ministros y ex altos cargos después de que el Caudillo les enviara con el mítico motorista la orden de cese. V.g. Telefónica, Campsa, Telégrafos, Renfe, y pare usted de contar para no marear al personal.

Falleció Franco, llegó una modélica Transición que desembocó en una bien asentada Democracia representativa. Se hizo un barrido general sobre los modos y maneras anteriores, los de la dictadura, y los españoles empezamos a disfrutar de un nuevo escenario político.

Pero he aquí que España es el país de la picaresca. Y los pícaros demócratas de toda la vida, los que arribaron al nuevo Estado de derecho enarbolando banderas de años de honradez, no lo barrieron todo. Tarde o temprano ellos habrían de abandonar también sus poltronas, y había que asegurarse el futuro, así que cuidadosamente, en vez de barrer los sucedáneos, los arrinconaron, como suelen hacer los malos barrenderos. Y de vez en cuando echan manos a uno de ellos.

Mi joven amigo Antonio Rodríguez Castillo, después de gobernar durante ocho años el Ayuntamiento de Ayamonte con más pena que gloria, aunque él no tenga la culpa de la gravísima crisis económica que tuvo que soportar, también ha acudido al rincón de los sucedáneos no barridos. Y de él ha salido con uno de rimbombante nominación, algo así como Delegado Territorial de Economía, Desarrollo, Innovación, en fin pilarín.

Personalmente le deseo suerte, y él sabe que digo verdad. Pero que luego no me vengan los suyos, los del Psoe, con aquello que enarbolaron en los albores de la Transición: los cien años de honradez. Aunque solo sea por aquello tan sabido de que "al que escupe para arriba...........,o para que el ilustre mojarra ayamontino José Manuel Delars no acude a su "maldita hemeroteca".

MOJARREANDO: El Partido Popular, origen de todos los males.

Vivimos momentos difíciles, más que difíciles, dramáticos. Cientos de miles de ciudadanos víctimas de una guerra civil y del terrorismo islamista, invaden Europa en busca de trabajo, de paz, de libertad. Llegan hambrientos, enfermos, exhaustos. Vienen en busca de lo que para ellos es un paraiso, la sociedad del bienestar que creó Europa después, precisamente, de soportar nada menos que dos guerras mundiales.

Paises como Hungría -los blogueros más viejos recordarán aquella película, "Los ases buscan la paz", que narraba la odisea de Kubala, escondido en un camión huyendo de la barbarie comunista de aquellos momentos- le niega asilo levantando vallas infames. Al socaire de Hungría, otros paises hacen lo mismo. La ratonera es evidente. La desesperación, la angustia, la desesperanza, invade esos campos donde se apiñan refugiados por miles, durmiendo a la intemperie, atendidos sólo por la caridad de los de siempre: las ONGs, tanto religiosas como laicas.

Entretanto, las televisiones españolas analizan el problema desde la comodidad de un estudio, sin compromiso y sin riesgos. Los "expertos en todo" invaden los estudios analizando el problema y ofreciendo soluciones sin ton ni son. Buscan la génesis de la desgracia. Y la encuentran, al fin nuestros maestros del Periodismo han dado en la tecla. Las cadenas "Cuatro" y "Sexta", como no podía ser menos, tienen muy claro dónde radica la génesis del mal. Y después de luengos y reiterados debates, el final siempre es el mismo: la valla de Melilla levantada por el Gobierno del Partido Popular. El análisis periodístico de esta desgracia en ambas cadenas siempre desemoca en lo mismo.

Porque, no vayan a creer ustedes que los fanáticos sirios, islamistas, yhiadistas, esos criminales, esos asesinos, tienen culpa de nada. Ni Hungria, ni Austria, ni Alemania, ni Eslovenia, por levantar concertinas; ellos miran a la valla de Melilla construída por el Gobierno del Partido Popular, y llegan a la conclusión de que al menos en España, por parte de esa nueva clase política emergente cuentan con su comprensión.

Sí, amigos blogueros, el iter es sencillo, nos lo dicen en la Sexta y en Cuatro en cada análisis: Siria, Líbano, Irak...Valla de Melilla construida por el Partido Popular, génesis, origen de todos los males que afectan a la Humanidad.

MOJARREANDO: Un luthier a orillas del Guadiana.

Siempre tuvo Ayamonte fama de dar buena acogida a los forasteros que decidían quedarse a vivir en la ciudad, prestigiosos comerciantes y profesionales de nuestros días así lo decidieron en su momento: Paco Abreu, Paco Cabrera, Manolo Tinoco, la familia Gámez...

Hoy, todos ellos son padres y abuelos de ayamontinos. Corrió la leyenda de que a los forasteros se les trataba mejor que a los naturales del pueblo. Pura leyenda urbana. Ellos, con su trabajo y tesón se ganaron a pulso todo lo que consiguieron.

Las nuevas generaciones quieren seguir el mismo camino. Y eso es bueno para todos.

Hoy quiero presentaros a un joven que ha seguido ese camino. Se llama Isaac Parejo Morales, es hijo de un matrimonio con el que guardo muy buena amistad: el padre, compañero al servicio en el Ejército del Aire; la madre, monitora de artes plásticas en el Ayuntamiento de San Juan de Aznalfarache, mi profesora de dibujo en aquella ciudad en la que viví nada menos que cuarenta años.

Isaac es ingeniero agrónomo. Pero ha cultivado una afición que le envuelve y ocupa toda su actividad, la afición a la música le ha convertido en luthier, es decir, constructor y arreglador de instrumentos musicales de cuerda, tanto manuales como eléctricos.

Os lo presento a través de  mi blog en la seguridad de que cuando le conozcáis descubriréis su gran magnitud artística y humana. Seguramente muchos ayamontinos tienen en sus casas un instrumento estropeado o desean tener uno nuevo a su elección, pero ignoran que tengan un luthuier tan cerca. Yo me he permitido acercarlo a todos.

MOJARREANDO. Adiós, Eblerino, adiós.

Se marcha, sí, se marcha o, mejor dicho, lo largan. No me lo podía creer, pero ya me han ratificado la noticia. Lo mandan a Sevilla,yo pensé que iría a San Gonzalo, pero una persona competente me asegura que no, que va a la Comunidad de Sevilla pero no a San Gonzalo.

Pero eso sí, a Sevilla. A la Sevilla de las múltiples tradiciones religiosas, la de las cofradías, la de las glorias, la rociera, la de las salidas extraordinarias, la de las Vírgenes no coronadas, y digo no coronadas porque la mayoría ya lo están, las de los templos abiertos todo el día...

Y allí se va este Eblerino que se aprovechó de la indolencia ayamontina y del peloteo ancestral para ponernos el alma en vilo queriendo eliminar un Santo Entierro, un Corpus, negando cristianos homenajes a cristianas personas; negando a una imagen del Hijo de Dios pisar el presbiterio por donde él se pasea. Y así sin parar. Qué satisfecho habrá estado ese sacristán, qué horma más buena para ese zapato de falta de educación y desagrado crónico.

Y ahora en Sevilla, ¿vas a hacer lo mismo?. Pues no te arriendo las ganancias. Allí, en la novelera Sevilla te las van a dar todas en el mismo lado.

Y no quiero seguir, no merece la pena. El hecho de que te larguen ya es bastante premio para los ayamontinos, excepto para esos aduladores vestidos de curas que sí pueden pasearse por el presbiterio aunque no lo sean. Ellos sí; Pasión, no.

Veteyayveteya.

MOJARREANDO. Semana Santa en Pozo del Camino.

Confieso humildemente mi ignorancia acerca de esta romántica y entrañable procesión de Miércoles Santo en nuestra barriada de Pozo del Camino, pero una publicación en Facebook alumbra mi imperdonable ignorancia.

Es cierto lo que expresa un comentarista: "también es Ayamonte".

Creo que al evento le falta la debida publicidad para que llegue a conocimiento de todos, algún cartel, alguna comparecencia en las emisoras locales, cualquier forma de darlo a conocer.

A la vista de los pasos y de las imágenes -de las que sólo puedo publicar una en razón de la estructura del blog- uno tiene que desubrirse: todo resulta tan entrañablemente romántico, autóctono, esencial, quizás minimalista, aunque también quizás por ello resulte tan atractivo.

He prometido que el próximo año iré a ver esa especial procesión de Miércoles Santo en Pozo del Camino, y espero cumplir mi palabra. Hasta entonces, mi más sincera felicitación a los organizadores y a los partícipes de uno y otro sexo. Enhorabuena.

MOJARREANDO. El cura contrarrevestido.

Desde que llegó no para de hacernos la puñeta. Trasluce una enconada animadversión con todo aquello que refleje nuestra cultura, nuestras costumbres, incluso nuestra fe, sin tener en cuenta que gran parte de ella nos la insuflaron sus colegas de comunidad. Los Padres Paules llevan muchísimos años en Ayamonte y siempre hubo una más que considerable empatía entre comunidad y fieles.

Pero el cura Eblerino, posiblemente víctima de un rebote que supone haber perdido el puesto que por razón de organización comunitaria le arrebató el anterior párroco, cada día da un pasito adelante para ganarse no precisamente la simpatía de los fieles.

Empezó desdeñando el hecho de que contásemos con dos Yacentes y dos Corpus; no asistió ni delegó para que otro lo hiciera, en el Vía Crucis de Agrupación con el que se abre la Cuaresma, algo que precisamente hace puntualmente alguien que está un poquito encima de él, como es el Santo Padre; al Señor de Pasión no lo ha dejado salir de su capilla para el Tríduo porque al parecer le estorba en el presbiterio.

Y hoy, Domingo de Ramos, para la procesión -ojo, Eblerino, que es litúrgica- ni siquiera se ha revestido, y se nos ha presentado muy maqueao pero muy catetil, un tanto recordando a Paco Martínez Soria o, como decimos los ayamontinos, encartonao.

Está claro que a él le da igual. Peor para él, porque tarde o temprano los ayamontinos recibiremos la noticia de que lo han largado, y entonces respiraremos profundamente. Y si se tercia, hasta lo celebraremos.

Entretanto, yo me permito decirle: Eblerino, vete ya y vete ya.

MOJARREANDO. Todos con Aspeatro.

En esta ocasión, más que un artículo, me permito publicar una invitación a la participación de mis paisanos en un nuevo envite de generosidad y solidaridad con los más débiles.

Entre las actividades de Aspeatro, una nueva entra con fuerza por la gran necesidad de los damnificados, que no son otros que los más débiles: los niños.

Se ha puesto en funcionamiento un  economato infantil, se trata de aportar todo aquello que es vital para el desarrollo y calidad de vida de los níños: comida, ropa, artículos de higiene...todo será poco.

En la fotografía que acompaña esta entrega se explica claramente de qué se trata.

Por favor, todos tenemos que volcarnos con los más débiles, tenemos que llevar tranquilidad, sosiego, a las sufridas madres que acuden con sus pequeños a la sede de Aspeatro.

Ni que decir tiene que estoy seguro de que los ayamontinos, una vez más, seremos generosos.

MOJARREANDO. Una pica en Flandes.

Hace un par de días me llegó la buena nueva de que el coro Los Conquistadores del son había alcanzado el primer premio de la modalidad en el concurso provincial del carnaval de Isla Cristina. He dejado pasar un tiempo para digerirlo, porque queramos o no, resulta insólito. Que fue el mejor coro de los tres participantes con diferencia parece obvio según se oye decir a todo el mundo. Pero lo de insólito pasa por otros caminos.

En nuestro pasado Siglo de Oro, paradójicamente espectacular, brillante, en las artes, y de estrépitosa decadencia  en el dominio de nuestras posesiones, los españoles lucharon sin cesar y ya a sabiendas de que no se conseguiría nada, en todas partes del Imperio, pero especialmente en Flandes. Poner una pica en Flandes era la obsesión del Rey, y el escritor Arturo Reverte nos deleitó con una brillantísima novela -El Capitàn Alatriste- que así lo confirma. Después vino la película, magnífica, por cierto, aunque a a lo mejor no le parezca así al crítico ayamontino don Juan José Santana Hernández.

Poner una pica en momentos casi imposibles es sinónimo de valentía, osadía, incluso de heroicidad. Y por aquello de que la Historia se repite, nuestro Coro de los Conquistadores del son pusieron una pica en el flandes isleño. Y bien cierto que triunfaron, ya digo, sobre todo por la calidad indiscutible del grupo. Era harto difícil trinfar en Isla Cristina, es como si un concurso organizado en el Nou Camp lo ganara un socio del Real Madrid. Pero, como dijo el Ingenioso Hidalgo de la Mancha, "cosas veredes, amigo Sancho".

Enhorabuena a todos. Por cierto, ¿ya se ha terminado de desmaquillar el amigo Delars?. 

MOJARREANDO. La ufanía sin límites de

De las muchas películas que han hecho mella en mí -con permiso del amigo Santana, al que no he consultado- es "La lista de Shindler". Una escena de esa película me metió en ese estadío de la reflexión al que pocas veces solemos acudir:

El coronel nazi encargado del campo de exterminio está a punto de acabar con la vida de un joven judío. Shindler trata de disuadirlo con un argumento que podríamos denominar de "contracorriente", y trata de darle a entender que el poder no consiste en hacer algo, sino en dejar de hacerlo cuando se puede hacer, es decir, que ese coronel tendría más poder si fuera capaz de "no matar" al joven judío que de matarlo, lo que significaría tener poder sobre lavida, pero también sobre la muerte, poder total. Si mal no recuerdo, surtió efectos durante un tiempo, pero al final, la cabra siempre tira al monte...

Esta gente de Podemos ha tenido la osadía de desafiar a todos los sevillanos y andaluces poniendo en solfa algo tan tradicional y arraigado como la Semana Santa, con todo lo que ello representa en el orden religioso, cultural, social y, por qué no decirlo, económico. (Claro, que en lo de económico no se han parado siquiera, al fin y al cabo en Venezuela no hay Semana Santa como en Sevilla).

Pero habiéndose dado cuenta de semejante barbaridad, aparecen ahora con la más impresentable de las ufanías: la jactancia sin límites. Y van y nos dicen: "bueno, hemos pensado mejor que vamos a dejar que siga la Semana Santa". Así que los sevillanos, los andaluces, y todos los españoles que celebramos la Semana Santa según el entender de cada lugar, deberíamos en estos cruciales momentos salir a la calle y manifestar nuestro más profundo agradecimiento a Podemos por dejar que sigamos disfrutando de una fiesta secular, posiblemente la más arraigada de todas.

Ni Chaves y Maduro juntos se atrevieron a algo parecido.

MOJARREANDO. Santa Teresa Romero.

De un tiempo a esta parte, la vida judicial española ha cambiado de espacio. Antes, mucho antes que lo hagan los jueces en virtud del mandato del artículo 117 de la Constitución, los asuntos propios de la Justicia vienen a dilucidarse en los foros televisivos, a los que acuden "expertos y expertas" de mundial consideración y prestigio.

En sede juicial un procedimiento, máxime si es penal, suele durar años, lo que a veces resulta excesivo, es cierto. Pero en sede televisiva un procedimiento penal se puede liquidar en una mañana, una tarde, un mediodía. Bajo la batura imparcial y objetiva de García Ferreira o Jesús Cintorras (La Sexta y Cuatro), periodistas de tres al cuarto metidos a juristas, escudriñan el asunto y en menos de un suspiro dictan sentencia.

Pero luego viene aquello que inmortalizó Paco Toronjo en un fandango: "no preguntes por saber, que el tiempo te lo dirá". Y los sabios de la tele ni se inmutan, ni rectifican ni nada que se le parezca. Silencio cómplice.

El caso de la sanitaria Teresa Romero, elevada a los altares de las dos cadenas, es puro paradigma: su estrategia de ocultación y mentira (a su médica, a su peluquera y clientes de la peluquería), tuvo como resultado la lapidación de un Consejero de Sanidad, y de camino - ese Pisuerga que siempre pasa por Vaalladolid-, del propio partido al que pertenece.

Pero resulta que el consejero tenía razón: "Santa Teresa de Sexta/Cuatro" mintió y ocultó su posible contagio de ébola, a su médica, a su peluquera y a todas las señoras que a la sazón se encontrasen en la peluquería. Mientras, el malo, el infame de la película, el que dijo la verdad, terminó ardiendo en el infierno de Sexta/Cuatro.

La "santa" ha reconocido su mendacidad, no voluntariamente, sino conminada por la amenaza de una queralla. Pero ni Ferreiras ni Cintorra se han hecho especialmente eco del asunto. En fin, pilarín.

MOJARREANDO. ¿Qué pasa con el cura Eblerino?.

 Hace mucho tiempo que no subo Ainé Carbonell camino de la iglesia de las Angustias, razones de peso me impiden entrar regularmente en un templo que por comodidad de sus administradores ha sido puesto en manos de gente incompetente, que hace y deshace a su antojo.

Desde hace tiempo se ha puesto de moda eso del Consejo Parroquial, lo que supone que los curas hagan aun menos de lo que ya hacían, hasta el punto de que, según tengo entendido, son los seglares los que llevan el llamado despacho parroquial, manejan sus libros, sus asientos, toman decisiones, etc.

Para colmo, nos ha caído, no sé de dónde, pero desde el cielo seguro que no, un nuevo párroco, que según oigo y leo, parece que nació para detestar todo aquello que suene a costumbre ayamontina, a usos ayamontinos, a cultura popular: todo lo ve mal, como antaño ocurrió con sus antecesores que llegaron a llamar a las imágenes "los santos de palo" para luego, según convino, sacarlos a todos a la calle para alentar la llegada de los misioneros allende los sesenta del pasado siglo, o con anterioridad enaltecer el régimen franquista como se desprende de la fotografía que publicamos, con militares y falangistas alrededor del abundante clero. (Acerquen la foto y observen las ilustraciones colocadasen el mirador del edificio de los Pérez, al fondo).

A este buen hombre -ignoro qué conocimientos de él tendría el visitador Juan de la Rosa Mendoza, ayamontino por cierto, para obsequiarnos con semejante "regalo"-parece que no le gusta nada de lo que se hace en los templos relativo a tríduos, traslado de imágenes, adornos florales, procesiones públicas, etc.

En el Evangelio dice Jesús a sus apóstoles aquello de que si en algún sitio no os reciben bien, sacudid las zapatlillas y marcharos a otro lugar.

Yo me permito decirle al cura Eblerino, desde mi condición de ayamontino y creyente, que si no le gusta nuestras costumbres, que sacuda sus zapatos y se largue a otro lugar donde lo entiendan mejor o entienda él mejor a los demás.

Y a mi amigo Juan de la Rosa Mendoza, que en qué está pensando, que a qué espera para hacer eso que según tengo entendido se lo están pidiendo a voces. Me dicen que el móvil se le cae de las manos de tanto sonar. Lo malo es que Eblerino no está solo, a su alrededor sobran medradores, gentes a las que les encantan las vestiduras talares y una vez revestidos se convierten en "eblerinos" al uso. Hay veces en que el prebisterio de la iglesia de las Angustias vienen más concurrido que la misma basílica de San Pedro cuando oficia el Papa. En fin, pilarín.