TONTOS DE CAPIRUCHO. Adiós, Semana Santa, adiós. Anecdotario desenfadado. 5: los cuerpos de acólitos
Es cierto que en Semana Santa no todo es pijerío y pamplineo, aunque ello abunde, también hay seriedad y mucha. La nuestra no podía ser menos y este año hemos visto una estampa realmente agradable: la de los acólitos adultos poniendo orden, estética y responsabilidad delante de los pasos, precisamente todo lo contrario de lo que hacen los cangrejeros.
El de acólito es un ministerio de la Iglesia Católica y también de la Anglicana, cuyo oficio es ayudar al diácono cuidando del servicio del altar y ayudando al sacerdote durante las celebraciones litúrgicas, especialmente la Misa. Son llamados también “ministros extraordinarios de la comunión” por la facultad que les compete de distribuir la sagrada forma entre los fieles y guardar la Eucaristía en el sagrario.
Es reconocido este ministerio por parte del Obispo, aunque en la práctica sólo se realiza por los llamados acólitos “extraoficiales” (v.g. Agüillas, padre e hijo, Amorós, Mayo, Pepe Márquez, Landero, Margallo (padre Juan), Ramón y otros). Y contrasta o se diferencia del monaguillo en la edad y consiguientemente en las competencias o atribuciones.
Con los cuerpos de acólitos “extraordinarios”, y lo digo así porque ignoro si han sido instituidos por el obispo, nuestras procesiones ganan en seriedad. Pero personalmente me gusta ver también a los acólitos pequeños, es decir, a los monaguillos, y me pregunto: ¿sería mucho pedir que, sobre todo para hacer escuela y cantera, se mezclaran y así esos niños aprenderían de los mayores a guardar el orden?.
4 comentarios
paco me -
¡Y es cierto!, Porque por mas que he preguntado, sigue siendo un misterio. ¡Nadie sabe donde fue el desprendimiento!.
paco jones -
kaul -
paso de palio -