LA BUENA GENTE DE AYAMONTE. Juan José Santana: un comunista en la Plaza de Santa Angela.
Un día oí a una señora muy metida en años hablar así de un vecino suyo: “es comunista de toda la vida, pero muy buena persona”. Así, como suena: los comunistas también pueden ser buenas personas. Yo conocí y guardé buena amistad con uno muy destacado en nuestro pueblo: Domingo el de los Caballitos, aquel concejal solitario al que Pepe el de la Punta, siendo concejal de cultura, le quitó el artículo “el” de su apodo y lo dejó en “de los Caballitos”. Y es que la Cultura muncipal tiene estas cosas.
Con el tiempo, no es que seamos amigos, y ello a mi pesar, ha surgido una relación empática considerable entre el destacado comunista ayamontino Juan José Santana y yo. (Guardo de él un gratísimo recuerdo cuando, metido a "cura laico", casó a una de mis hijas). Comunista o de IU, ese englomerado que nadie termina sabiendo lo que es, como ocurre con el Opus Dei. (Cuentan que Juan XXIII, en los últimas horas preguntó a su secretario: dime, hijo mío, que no me quiero morir en la ignorancia: ¿qué es el Opus Dei?). Y digo englomerado porque está compuesto por distintas clases de maderas; así, pueden hacer muebles con el Psoe, con el PP, con el PA, o con quien se tercie. Camino cierto para que al final no puedan hacer muebles propios.
No sé si el Santana ha practicado una huída hacia adelante o es que no quiere comulgar con ruedas de molino. Lo cierto es que de alcaldable ha pasado a ser únicamente tabernero bohemio y libertario en ese ateneo de Pepe Pinto-Plaza de Santa Angela.
Me gusta el Santana –bien entendido que como persona, no vayamos a creer otra cosa- me gusta su talante abierto, su capacidad de diálogo, su ausencia de fanatismo. Y me gusta más todavía que no haya entrado en ese revoluto municipal, en esa fangá que a ningún buen puerto nos ha de llevar. Al final, IU, ni fu ni fa, ni chicha ni limoná. Como el perro del hortelano, vamos.
Y el Santana en su ateneo. Ahí está mejor, detrás de su ordenador leyendo los artículos de Mojarrafina. Como debe ser. Desde hoy lo incluyo oficialmente en la lista de la buena gente de Ayamonte.
27 comentarios
El Bohemio tabernero -
El Cafe cuando te apetezca, faltaría mas!!!. Un abrazo, por cierto, magnifica película elegiste de nombre, si señor, q buenas charlas nos dimos, jajaja
mojarrafina -
El Lado Oscuro del Corazón -
Santana destaca además por su talante dialogante, su pasión en todo cuanto emprende, su elegancia cuando salió de la política, su humildad y discreción sabiéndose más querido y respetado que "el otro candidato" pero, sobre todo, por su amor por el cine.
Posiblemente la persona que más sabe de cine en kilómetros a la redonda.
Brindo con un café gratis (me lo debe hace tiempo) por un hombre encantador, íntegro y feliz.
Paracuellos del Jarama -
Paracuellos del Jarama -
El Conde Olino -
En torno de una mesa de cantina,
una noche de invierno,
regocijadamente departían
seis alegres bohemios.
El humo de olorosos cigarrillos
en espirales se elevaba al cielo,
simbolizando al revolverse en nada
la vida de los sueños.
Pero en todos los labios había risas,
inspiración en todos los cerebros,
y repartidas en la mesa, copas
pletóricas de ron, whisky y ajenjo.
Era curioso ver aquel conjunto,
aquel grupo bohemio,
del que brotaba la palabra chusca,
la que vierte veneno,
lo mismo que melosa y delicada,
la música de un verso.
A cada nueva libación, las penas
hallábanse más lejos
del grupo, y nueva inspiración llegaba
a todos los cerebros
con el idilio roto que venía
en alas del recuerdo.
Bebo y brindo, exlamó, el interpelado,
brindo por mi pasado,
que fue de luz, de amor y de alegría;
y en el que hubo mujeres seductoras.
Brindo por la mujer, mas no por esa
en la que halláis consuelo en la tristeza
rescoldo de placer ¡desventurados!;
no por esa que os brinda sus hechizos,
cuando besáis sus risos
artificiosamente perfumados.
Yo no brindo por ella, compañeros,
brindo por la mujer, pero por una,
por la que me brindó sus embelesos
y me envolvió en sus besos;
por la mujer que me arrulló en la cuna.
Por la mujer que me enseñó de niño
lo que vale el cariño
exquisito, profundo y verdadero,
por la mujer que me arrulló en sus brazos
y que me dió en pedazos
uno por uno, el corazón entero.
¡Por mi madre! bohemios, por la anciana
que piensa en el mañana
como algo muy dulce y muy deseado,
Por la anciana adorada y bendecida,
por la que con su sangre me dio la vida
y ternura y cariño, por la que fue la luz del alma mía
y lloró de alegría, sintiendo mi cabeza
en su corpiño.
El bohemio calló, ningún acento
profanó el sentimiento
nacido del dolor y la ternura,
y pareció que sobre aquel ambiente
flotaba inmensamente,
un poema de amor y de amargura.
Desierto -
EL GUARDIAN DEL REGISTRO -
Cuñaoooooooo... -
Estepa -
La verde pradera -
La casa del Salón -
Marx, Karl -
Ayer -
El bohemio tabernero -
El de siempre -
Lo cual, por cierto, no es impedimento para que sea buena buena persona...que eso ya es apreciación personal de cada cual.
No me quite la razón cuando la tengo.
Me echaba de menos eh???!!!
Paracuellos del Jarama -
Fernando Pargana -
Pues si tabernero osáis
¿cómo vuestra merced os arregláis
para ver alguno más tragón?
!Quiyo y no hagah pucherito!
que en la foto no quea mal
pero ya ereh mayorcito
¡joé con er chaval!
¡Y encima comunista!
Que a mi ni fu ni fa (lo juro)
porque en el circo de la política
Todos son grandes artistas (con futuro)
en el arte de palabrear (con mítica)
y malabarismo en lo oscuro.
Al de las gafas y al Armando, (el Guitarrista), que va mucho a ese bar. Un abrazo de su hermano.
El de siempre -
Por cierto... osó el Mirabent poner la mano sobre la Sagrada Biblia para prometer (supongo que no juraría) su cargo de concejal ???
Qué país !!!
Cichorium intybus -
Saludos
Paracuellos del Jarama -
Valle de los Caídos -
EL GUARDIÁN DEL REGISTRO DE PAREJAS DE HECHO, -
En la quietud los cafetales vuelven a sentir,la vieja molienda -
Saludos
El Mojarra del Peñón -
El padre de la novia y de la hija que fue madrina -
La hija que fue madrina, no novia -
Sólo una cosa...¿ausencia de fanatismo?...nómbrale a Butragueño y verás.Jejeje y que rico el café del Alcaraván.