AYAMONTE EN EL RECUERDO: 71: el loro de Barberi.
Hace ya muchos años, el que siempre ha sido el restaurante por antonomasia de Ayamonte, Casa Barberi, guardaba en sí mismo muchos encantos. A saber:
Era el único restaurante del pueblo, y sin embargo, el Sr. Barberi jamás aprovechó esa circunstancia para convertirlo en un restaurante elitista, los precios de su barra eran normales, tan normales, que a mediodía era frecuente ver a marineros y trabajadores del muelle degustando el “fino Valderas” con aquella tapa inconfundible e irrepetible de arroz de la casa.
Manuel Barberi estaba siempre abierto a dialogar con quien quisiera sentarse a su lado, especialmente si la conversación era sobre puros habanos pues tenía enmarcada toda una colección de vitolas que exhibía con orgullo.
Pero sobre todo, algo destacaba de aquella antigua Casa Barberi, que gracias a Dios hoy permanece ya de la mano de su nieto, y ese algo no era otra cosa que el loro, el conocidísimo y famosísimo loro de Barberi.
Resultaba casi imposible pasar por la puerta del restaurante y no asomarse unos segundos para decirle al loro: maricón. ¿Y qué creen ustedes que contestaba el loro?, pues eso mismo, maricón, además de puta y otras lindezas, porque claro, tratar de enseñarle a un loro, aunque fuera en aquellos tiempos, el Ripalda, era demasiado.
El loro de Barberi era un poco de todos los ayamontinos, no recuerdo que fue de él, pero casi con toda seguridad que moriría de viejo, pues atenciones no le faltaban. Es cierto, como decía antes, que el restaurante sigue en buenas manos y con las mismas premisas, pero hay que reconocer que sin el loro y sin Isabel la Jeringa, ya no es lo mismo
7 comentarios
EL KUN -
KKKKK -
lEL KUN -
Trini Flores -
José María Mayo -
Saludos.
Calixto -
José María Mayo -
Evidentemente, apellidándome como me apellido, no podría tener una mascota que no fuera un guaca-mayo.
Por cierto, unos me comentaron en tiempos que el loro de Barberi era amarillo y otros me dicen que era verde... a ver si tú me sacas de dudas.
Saludos.