AYAMONTE EN EL RECUERDO. 77: LA PLAYITA DEL SALÓN.
Mucho ha cambiado Ayamonte en los últimos cincuenta años. Puede que todo comenzase a primeros de los sesenta del pasado siglo cuando se unió el centro con el Salón de Santa Gadea y la posterior construcción del puente de Canela. Ello abrió sin duda una nueva etapa en la expansión urbana de la ciudad que a estas alturas del siglo XXI parece imparable.
Pasaron los tiempos del recordado Muro de Canela; se acabó el aislamiento de la entrañable isla, cuna y casa de pescadores. Y los ayamontinos volaron hacia las playas de San Bruno y de Isla Canela. Atrás quedaron la Gola y aquellas excursiones a Isla Cristina. Ya teníamos playa a nuestro alcance.
Pero aun así, hubo paisanos que siguieron yendo a un lugar emblemático de Ayamonte para los de mi generación, un lugar que nos hizo disfrutar, no del mar, sino del río, que nos hizo pasar días estupendos de sol, de baños, de caza de caballetes con lazos, de saltos de “trampolín” desde una balda de piedra.
Ese lugar no era otro que la conocida cariñosamente como la Playita del Salón. Quedaba entre la casa del Salón, hoy en ruinas y a merced y disposición del trapicheo de droga, y el estero de Canela. Había que esperar que subiera bastante la marea para que se introdujera en una pequeña zona de arenas pues con bajante había que meterse en el fango de la orilla del río. Con la marea alta muchos de lanzaban desde una balda de piedra, incluso se aprovechaba algún pequeño espacio para jugar a la pelota.
La Playita del Salón fue durante muchos años la playa de los ayamontinos, pequeña, no muy cómoda, pero nuestra. Muchos aun la recordamos con cariño. Me he permitido quitarle una foto desde la azotea de la torreta donde vivo en el Salón. Es lo que queda, además del nostálgico recuerdo.
5 comentarios
Isabel Gómez Arenas -
pintarrjoaconpapas -
PACIFICO -
Diego -
Ayaba -
Cuando eramos más grandes jugabamos un partido de futbol donde ahora esta el parque y luego a bañarnos a la barda del salón, un dia cuando ibamos llegando uno salio corriendo se subio a la barda y se tiro de cabeza al agua cuando llegamos los otros estaba clavado en el fango, fue tan rapido que no vio que la marea estaba vacia y se clavo.