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Mojarra Fina: El Blog de la Mojarra Fina Ayamontina

LA BUENA GENTE DE AYAMONTE. 1: PACO Y JOSELITO

LA BUENA GENTE DE AYAMONTE. 1: PACO Y JOSELITO

Creo que también ellos deben tener su hora, su página, su momento tan merecido. Citamos en este blog a los ayamontinos de pro, es decir, aquellos que a lo largo de su vida han servido a Ayamonte con afán desmedido sin pensar en compensaciones de ningún tipo; a los ayamontinos inolvidables, aquellos que nos dejaron para siempre, pero sobre todo que nos dejaron su obra, sus vidas ejemplares. Es pues momento  también para que tengamos en cuenta, que nos acordemos de algunos ayamontinos, que la gran labor de sus vidas consiste, y les aseguro que no es nada fácil, ser buenas gentes, buenas personas.

Si abrimos cualquier periódico por la página de la esquelas mortuorias, leeremos epitafios ridículos a todas luces –tengo una pequeña colección de ellos-, personas cargadas de títulos sobre todo, abundan. Pero es cierto que de vez en cuando aparece un epitafio que dice cosas así: buena persona, buena madre, etc.

Esas son las gentes, los ayamontinos, que visitarán esta nueva sección  del blog, esos ayamontinos que cuando hablamos de ellos lo primero que se nos ocurre es decir que son buenas personas, para qué más.

Los primeros están en la foto que ilustra este artículo. No hay orden ni alfabético ni de ningún otro orden, simplemente irán saliendo de forma aleatoria. En esta vemos a dos ayamontinos de esos que son apreciados por todo el mundo, a pesar de que el gran Paco el Bizcotela tiene su genio, su pronto, pero es que se le sonsaca demasiado; desde hace años vive en el asilo con su esposa, la conocida y querida Paya, hija mayor de aquel ayamontino inolvidable ya citado, José el Paye. Paco es, ha sido siempre, un filósofo de los de a pie, un pensador de lo cotidiano.

En la foto aparece acompañado de otro buen ayamontino, mi amigo Joselito, de la familia de los Tiñoso –espero que esto de los motes se tome con normalidad, como debe ser, porque no son ofensivos-, el hombre polifacético, yo creo que no hay menester en eso de ganarse la vida honradamente que Joselito ignore. Tuvo durante unos años una tienda de desavío en la calle Buenavista, esquina a calle Olivo,  y su amabilidad y buen servicio eran sus mejores productos. A mí me da la impresión de que si Joselito tuviese algún día mucho dinero no sabría qué  hacer con él, porque me tengo que es de esas personas que se conforman con lo necesario con tal de ser feliz, de vivir tranquilo.

Espero haya sido este estreno del agrado de mis blogueros. Y espero también los comentarios que pongan de manifiesto el cariño que se les profesa a estos personas, a estos buenos ayamontinos. Y estoy seguro que un bloguero habitual, el Ayaba, será de las primeros, porque creo guarda muy buenos recuerdos de Paco el Bizcotela.

Por cierto, ¿qué les pasa a mis queridos blogueros, Fa, 66, Vidalríos, Magodi, que hace tiempo que no aparecen por aquí?.

 

2 comentarios

Ayaba -

De Paco el Vizcotela ya comente un poco en el articulo que se hizo a su inolvidable suegro José el Paye el 27/5/2009.
A Paco además de por ser buena persona yo le tengo mucho aprecio, como le tengo a todos los que nacieron en la calle Marte desde mediado de los años cuarenta hasta últimos de los sesenta porque en esa calle a ultimo de los cuarenta nací yo y fueron las primeras personas con quien me relacione, con las primeras que tuve amistad y cariño.
Paco vivía en un sitio humilde un corralón casi enfrente un poquitin más arriba de la puerta de sol de la plaza de toros, con sus padres y su hermana, si Paco tenia una hermana mayor que él que se llamaba Bruna, poca gente se acordara ya de Bruna mi tía que era su amiga y poca más.
Trabajador en el muelle de lo que tocara, sardinas, pescado, cáscara de almendras, troncos de árboles; si en aquellos tiempos había enormes montones de cáscaras de almendras, y al lado de la aduana donde hay un edificio muy alto aquello era un solar con un muro muy grande en lo alto la Casa del Niño en nuestra época, en el siglo XV Hospital de la Paz, pues bueno todo aquel solar estaba lleno de troncos de árboles que no se de donde los traían y a donde los llevaban a los niños nos servían para escondernos jugando.
De los últimos trabajos que tuvo Paco ya lo sabéis.
Cuando se le sonsaca tiene el pronto de las personas buenas que dura unos segundos y después no pasa nada.
A Joselito lo conozco de verlo en el pueblo y me consta que es una buena persona.

fa -

Buenisimas personas éstos dos personajes, sí señor. Larga vida deseo a ambos.
Bueno Trini: me dices que hace tiempo que no aparezco en el blog. En "Agrávio a un médico ayamontino" aoarezco, lo que pasa que, yo dejo mi opinión, y trato de no entrar al trapo por ninguna otra opinión. Observo que hay blogueros que, en el mismo tema entran varias veces, transformando el lugar destinado a -comentar-, en un lugar para la polémica y descalificaciónes, seamos coherentes y, entendamos de una vez que el blog no es para eso.